La noche del 11 de febrero de 2008, ella estuvo viendo televisión con sus hijas, nietas y nietos, luego de un rato, ella se quedó dormida. Después de un lapso de tiempo, ella fue despertada por un ruido producido por sus nietos (dos hermanos de ocho y seis años). Ella abrió sus ojos y vio que en el rincón del living, ellos dos estaban discutiendo, pero lo raro fue ella vio a un tercer niño, le parecía extraño, ya que habían sólo dos niños en su casa, cómo podría haber un tercero? Ella se fijó de nuevo… era una persona con cabellos largos, con la altura de una niña, sin embargo, su cara se veía vieja. Ella vio que aquella chica golpeó fuertemente a su nieto de seis años y luego apuñó fuertemente al hermano mayor de ocho años, después se puso detrás de ellos y les provocaba diciendo: pégale, pégale! Sus dos nietos se pusieron a pelear y esa chica se puso contenta aplaudiendo! Se pusieron a pelear los tres!
Ella miró bien a ese tercero y se dio cuenta que no era una persona, sino un demonio! De inmediato ella dijo: en nombre del Señor Jesús expulso el demonio! Sin embargo, no tenía la fuerza, ni siquiera para hablar, sólo pudo clamar en su corazón: en el santo nombre del Señor Jesús apártese Satanás! Ese demonio se asustó, giró la cabeza y la miró, luego caminó hasta un sofá que estaba próximo a ella y se sentó, sin embargo, su mirada no se apartaba de los niños que estaban en pelea.
Ella fue controlado por el demonio y no podía abrir su boca para hablar! Ella intentó de nuevo diciendo: en el santo nombre del Señor Jesús expulso el demonio! En seguida el demonio desapareció y los dos niños dejaron de pelear. El hermano mayor dijo: voy a hacer mi tarea en el piso de arriba. El hermano menor fue a donde su madre y se sentó en un sofá viendo dibujos animados, y ella pudo estirar su cuerpo y hablar.
Ella dejó lo sucedido en su oración, consultaba a Dios y también pedía la protección de Dios a su familia. Dios dijo: ese demonio molestaba a los niños, les pegó primero y luego les provocaba para que se pelearan. Finalmente ellos se pusieron a pelear y se sintió muy contento por eso. Esto aplicando a los creyentes es lo mismo, cuál es la causa de enamorarse profundamente de un hombre o una mujer? En realidad el demonio está en aquella persona y cuando el creyente recibe las semillas carnales se sentirá atraído por esa persona ciegamente, mirando a dicha persona como la más bella del mundo! Sin él o ella no puede vivir, incluso deja de lado su creencia, cometiendo pecados que lo apartan de Dios. Cuando un creyente comete pecado (fornicación), el diablo devora a ese creyente, luego de inmediato lo deja y busca a otro creyente, y así, tentando y atacando continuamente! Cuando el diablo se aparta de “la bella” que le gustaba mucho, “la bella” no le seguirá queriendo, y en ese momento el creyente se despertará de su sueño y dirá: cometí pecado de muerte! Aunque llora y se arrepiente del pecado ya va a ser tarde, ya que no es posible que sea otra vez renovado para arrepentimiento! (Hebreos 6: 4-8)
En nuestra iglesia podemos encontrar a muchos creyentes que no se destacan por sus bellezas, tampoco por sus talentos, sin embargo, tienen muchos pretendientes. Hay creyente que ya no es joven, sin embargo, siempre tiene uno, dos, tres, incluso más pretendientes, como si fuera una estrella del espectáculo. Eso se debe a que los creyentes que guardan las palabras de Dios, emiten el olor grato de Cristo, tienen buen genio, son humildes y respetuosos, esforzados y responsables, inteligentes y sabios,… , entre otras cualidades positivas, y éstas hacen que los no creyentes se sienten atraídos y toman las acciones de conquista. ¿Será cierto eso? Desde el punto de vista de la gente de este mundo, los creyentes de nuestra iglesia de verdad son más bellos que otros? ¿De verdad que su belleza provoca la admiración y la inclinación amorosa de la gente esté donde esté, sin cambio con el paso del tiempo? ¿Es eso cierto? Pregúntese a sí mismo y si eso de verdad es cierto?
No! Esto es un truco de Satanás, ellos posan en el cuerpo de la gente para atraer los corazones de los creyentes que tienen la esperanza de salvación. Usan las palabras engañosas para que los creyentes ignorantes les sigan y con los labios lisonjeros los obligan que les acompañen. El creyente que no está lleno de Espíritu Santo, no ora con frecuencia, ni guarda las palabras de Dios en su corazón, seguirá de inmediato a la persona poseída por el demonio, como el buey al degolladero, o como el necio a las prisiones para ser castigado, o como el ave que se apresura a la red, y no sabe que es contra su vida, hasta que la saeta traspasa su corazón (Proverbios 7: 21-23). ¡Lamentable es de perder así la vida eterna!
Si llegas a gustarle a alguien que no es la pareja que Dios prepara para ti, ¿te sentirás muy contento(a) como un ave subido al cielo? ¿Viendo a esa persona como un regalo caído del cielo? No se olviden de la advertencia del anciano Pedro: echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca. A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén (1Pedro 5: 7-11).
Los creyentes de la Verdadera Iglesia de Jesús hay que procurar ganarse el corazón de Dios y no del hombre. Hay que hacer todo vuestro esfuerzo para agradar a Dios y no agradar a los hombres (Gálatas1:10), imitando a Pablo a ser el siervo de Cristo. ¿Qué posición tiene el siervo en la sociedad? Nada, sólo depende de la misericordia de su señor, esperando cumplir todo lo que le haya encomendado. ¿Se viste bonito el siervo en el mundo? No, sólo se viste de la justicia y la santidad de Cristo, aspirando en obtener el premio provenido de Dios. Si guarda las palabras de Dios, obedece al Espíritu Santo de la verdad, guarda su propio cuerpo y espíritu, viviendo así una vida victoriosa, el Señor Jesús le dará a comer del árbol de la vida que está en medio del paraíso de Dios (Apocalipsis 2:7).
(Este artículo continuará)
Testimonios del Espíritu Santo
Bienvenidos a esta página web Testimonios del Espíritu Santo. Pueden bajar los sermones, testimonios, himnos y leer artículos. Esperamos que puedan participar de las convocatorias espirituales de la Verdadera Iglesia de Jesús, con humildad buscar la verdad, creer en las palabras de Dios, obedecer el mandato de Dios, y finalmente, entrar al reino de Dios!
¡Que Dios les dé su paz!
El tesoro escondido
Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. (2P1:21)
Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía. (Ap19:10b)
Cantar de los Cantares
Solicite nuestro permiso antes de publicar este artículo. Para la citación de este texto, le pedimos que coloque la fuente del texto. ¡Gracias!
Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor sea con todos vosotros. (2Te3:16)
Alimento espiritual para compartir
La venida del sufrimiento está indicada claramente en la Biblia, es debido a que el hombre prevalece su propio pensamiento y deseos mundanos, desobedeciendo el mandato de Dios. Por eso la fuente del sufrimiento viene de los deseos carnales, el hombre es tentado por las pruebas! Estamos en las mismas condiciones, muchos malos hábitos, conceptos erróneos y el carecimiento de fe, vienen del procurar primeramente los deseos carnales, por eso los pecados de uno son manifestados.
¿Cómo nace este “pecado”? Leamos el libro de Santiago, capítulo uno, 14-15: sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.
Aquí habla claramente cómo el pecado es generado, éste viene de la propia concupiscencia, al dejar ese pensamiento en la mente, se concibe, y así nace el pecado! En otras palabras, determinas lo que vas a hacer y por cada error cometido se acumula, convirtiendo finalmente en pecado grande, naciendo así la muerte.
Si la persona vive dentro del pecado, no tendrá esperanza! Su vida no tendrá sentido! ¿Qué se puede hacer? Habría que buscar la vida verdadera en este momento. Muchos métodos del hombre no pueden solucionar el problema del pecado. Ay, si vives bajo los deseos carnales, tendrás muchas posibilidades de hacer nacer los pecados. ¿Cómo se resuelve este problema para que tu vida tenga esperanza? Habría que solucionar el problema del pecado!
Hablando terceramente la esperanza de la vida. ¿Dónde está la esperanza de la vida? Un diácono cuando dirigió una oración dijo: ¿Deseamos riqueza u otras cosas? En realidad todos estos trabajos son vanos! Basta estar con lo suficiente! El resto del tiempo tienes que aprovecharlo bien, para desarrollar y cultivar tu vida! Si una persona se queda atrapada en el sufrimiento, llevando una vida dentro del pecado, ¿cómo salirse adelante? ¿Sirve la ley? La ley condena al hombre por su pecado. ¿Te ayudará éste a renovar tu vida? Por cierto que no.
Nuestra vida, la vida diaria tiene muchas formas, la manifestación de la vida también tiene aspectos variados, y ¿qué hay que hacer con ella? Habría que pensar: la esperanza de la vida, ¿dónde la podemos encontrar?!
Veamos lo que dice en Tito, capítulo tres, 5-7: nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna.
La esperanza de la vida se encuentra en la salvación de Jesucristo! Aquí dice: obtenemos la salvación del Señor no por nuestras buenas obras, sino por la misericordia del Señor, por el lavamiento de la regeneración, éste es, el lavamiento que menciona la Verdadera Iglesia de Jesús, en nombre del Señor Jesucristo, sumergiéndose el cuerpo completo en el mar o río, para el perdón del pecado.
En el versículo siete dice: a través de la salvación del Señor, nuestro pecado es superado y podemos dejar nuestro sufrimiento en su mano, y tener así, la esperanza de la vida eterna! El día que recibes la salvación, o sea, el día que recibes el bautizo, obtendrás esta esperanza! Sabes bien que no podrás vivir eternamente en este mundo, un día tendrás que irte y vivir en el reino eterno preparado por el Señor, ya que dentro del Señor hay vida eterna. Por eso al conocer al Señor, nuestra vida no debe quedarse sólo en esta vida de la carne, sino más bien, avanzar y buscar la eternidad, la vida eterna del Señor! Ésta es la esperanza de la vida, cumplida por medio de la gracia de salvación de Jesucristo y por Su Espíritu Santo! Y ésta es la verdad única para obtener la salvación!
Y este camino tiene su trayectoria y es cumplido por Jesucristo! En el evangelio de Juan, capítulo uno, versículo 51 dice: “De cierto, de cierto os digo: De aquí adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.” El cielo se abrirá, luego habrá una escalera que llega hasta el cielo; ése es el puente para llegar al reino celestial, y este puente es fundado en el Hijo del Hombre Jesucristo! Por lo tanto éste es un muy importante testimonio!
Por eso el Señor Jesús dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6). El único camino para la salvación está en Jesucristo! Por su evangelio, que es la gracia de salvación levantada por su muerte en la cruz! Por eso éste debe ser nuestra meta a perseguir!
Veamos el primero de Pedro, capítulo uno, 19-21: sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.
Aquí vemos al anciano Pedro testificar: los ancestros usaban la sangre de los animales para la expiación, sin embargo, eso no sirve para limpiar el pecado, sino la sangre preciosa de Jesucristo derramada en la cruz! En realidad este gran plan de gracia de salvación fue determinado antes de la creación del mundo. Por eso en el versículo 20 dice: Jesucristo fue destinado desde antes de la fundación del mundo, en aquel tiempo ya estaba ese plan, sólo que se nos revela en los postreros tiempos. ¡Es Jesucristo! Que por medio de su muerte en la cruz y el sufrimiento que Él padeció, podemos seguir su ejemplo, recibir el bautizo, morir, sepultar y resucitar junto a Él. “En nombre del Señor limpia nuestro pecado” y al salirnos del agua! Nuestro pecado espiritual es lavado y limpiado, ya que el espíritu de Dios mueve entremedio! Éste es según lo que nos cuenta la Biblia, somos resucitados como Él resucitó de la muerte!
Por eso debemos tener más fe, la esperanza de nuestra vida está en Jesucristo. El autor del libro de Hebreo dice: Él nos abrió un camino nuevo y vivo (Hebreo 10:19-20), y éste es el único camino cumplido por Jesucristo.
La Biblia también habla del sufrimiento, cómo se supera eso? Hay que ir donde Jesucristo, de esta forma podrán apartarse del sufrimiento y obtener la paz! La Biblia habla del pecado, también cuenta el origen del pecado y la manera para solucionarlo. Habrá que ser por medio de su gracia de la salvación en la cruz, la sangre preciosa de Jesucristo, siendo eso la esperanza de nuestra vida y nos será perdonado del pecado! Este camino sólo puede ser cumplido con Jesucristo.
Hablando hasta aquí, qué es nuestra vida verdadera? Es Jesucristo! Somos creados por Él y nos dio la vida, por eso la fuente de la vida está en Él. Por esta razón lo adoramos, esperamos y dependemos de Él. Cuando llegamos ante Él, podremos obtener esta vida verdadera.
Pablo también dio este tipo de testimonio. Veamos el Primero de Timoteo, capítulo seis, 17-19: A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.
Pablo vio todo lo que hay en este mundo y posteriormente habló que hay que mantener una vida verdadera! Esta vida verdadera es Jesucristo! Nuestra vida no es nada, ya que algún día dejaremos de respirar y nos iremos de este mundo. Por eso mientras estamos vivos, debemos tratar de aferrarnos al Señor que nos da la vida eterna! ¿Cómo debemos esforzarnos y reaccionar? Éste debe ser el punto clave, ya que ya sabemos que la verdadera vida es Jesucristo.
Hay una religión, cuando predican sus palabras, decían a las personas: “Usted es como un elefante, cuando se queda atrapado en el barro, tiene que esforzarse para salirse del barro.” Piensan que el hombre o uno mismo está dentro de este barro o este mundo. Esta religión dice que vos estás dentro del barro! Y tú como aquel elefante, aunque tienes fuerza, sin embargo, te hundes cada vez más profundo! Mientras más fuerza ejerces para salirte del barro, menos puedes salirte de eso! ¿Cómo se debe esforzar para salirse de eso? Ellos te podrían decir: entregarles dinero para cambiar tu destino, ofrendar para construir el templo, entre muchos otros métodos! Pero qué dijo el Señor Jesús en la Biblia?
El Señor Jesús dio el ejemplo de las semillas. La persona que esparce las semillas es el Hijo del hombre que es el Señor Jesús. Esas semillas tienen vida! Miren que si hay muchos porotos que no pueden terminar de consumirlos y los dejan en los alrededores del camino, después de un tiempo, brotan! Luego se convierten en un cuerpo con vida! Por eso estas semillas tienen fuerza de la vida. Dios deja las semillas en los alrededores del camino, ese lugar representa el corazón del hombre. Cuando oyes el evangelio de Dios, ¿sientes la fuerza de la vida en tu corazón? Eso depende del tipo de persona. Luego de escuchar el evangelio, cada uno se siente de manera diferente. Cuando sepas que la verdadera vida es Jesucristo, ¿qué pensarás? “¡Ay! Mi vida es tan débil… si pudiera conectarme a la eterna vida de Jesucristo, entonces podré obtener su ayuda en esta vida, y además, me preparará el glorioso reino celestial en el futuro!”
Aunque es el mismo evangelio y la misma semilla, sin embargo, al llegar a diferentes personas y corazones, los resultados de poder experimentar la paz verdadera o no serán diferentes! Pueden vivir o no con el testimonio de la vida de Jesús, también serán diferentes!
De ahí vemos que de verdad tenemos que esforzarnos para recibir las palabras del Señor, para que cuando caiga la semilla en nuestro corazón se pueda brotar, y luego podamos encontrar al amo que hace crecer la vida!
Al pensar en esto, debemos afirmar definitivamente: realmente como persona no somos nada! Sólo por medio de Jesucristo podremos obtener la luz de la vida.
Veamos el libro de Colosenses, capítulo tres, 3-4: Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.
Aquí Pablo testifica diciendo: Ustedes ya han muerto! Esta parte se refiere a que ya han recibido el bautizo y la gracia de la salvación, el hombre antiguo con pecados ya fue crucificado en la cruz! Luego del bautizo, nuestra vida estará escondida con Cristo en Dios. “Escondido en Dios” tiene diversos significados:
Ser el hijo de Dios.
Obtener la gracia de la salvación de Dios.
Poder servir a Dios dentro de Él.
Cuando experimentas este tipo de testimonio, como el versículo cuatro dice: entenderás claramente que Cristo es nuestra vida y dirás al Señor Jesús: “Soy la vida”, con muy buenos testimonios…
“Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. (Salmo 23:4)
A veces enfrentamos dificultades, otras veces somos vencidos por la maldad como si estuviéramos pasando el valle de sombra de muerte. No sabemos cuando vendrán los accidentes ni las dificultades, pero podemos sostenernos en esta verdadera vida que es “Jesucristo”, su vara y su cayado nos infundirán aliento!
La vara y el cayado mencionados aquí, se refieren al poder, la gracia y la misericordia del Señor, los cuales llegarán a ti. Por eso damos la bienvenida a los amigos que buscan la verdad. Que ustedes puedan entrar a esta verdadera vida de “Cristo Jesús”!